El color, olor, claridad, precipitación y espuma pueden servir como indicadores del grado de uso del fluido. La precipitación es un sólido formado en el fluido por la contaminación. La espuma puede ser resultado de la agitación excesiva, niveles de fluido inapropiados, fugas de aire, contaminación o cavitación.
Para más información, lea nuestro boletín de febrero 2015.